¡Que corto tan bonito! Creo que esta oración ya explica por qué me llamó la atención...:-) Pero claro que también hay otras razones :-) Me parece que el cortometraje tiene una temática positiva, el amor. Y en el mundo de hoy donde todo está lleno de malas noticias ¿por qué no tratar un tema totalmente ingenuo como el amor entre un grúa y una girafa? Además es un tema muy abierto e interesante que podría llevar a discusiones típo: ¿todo tiene un alma? ¿Puede uno enamorarse de una cosa? etc.
Un aspecto particular del cortometraje es que no tiene palabras. Eso me parece ideal porque así los alumnos tienen que utilizar su propia imaginación. Uno podría por ejemplo utilizarlo para practicar los tiempos del pasado: los alumnos tienen que contar el cuento de la grúa y la girafa. Eso me parece innovativo porque normalmente se practican los pasados con sólo imagenes.
A mí también me gusta mucho este corto! A mí me parece que sólo a través del movimiento y de la música, están vehiculadas muchas emociones. Aquí no se necesitan palabras, creo que las emociones contenidas en el corto pueden llevar a los alumnos a inventar, crear una historia de manera oral o escrita.
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